Si sabés que te vas a tirar al sol (siempre protegiendo tu piel con protector solar, por supuesto) usá tu tiempo sabiamente. Aplicate shampoo en tu pelo y después acondicionador, pero no lo enjuagues. Cepillá tu pelo y hacete un rodete. El calor del sol va a calentar el acondicionador y va a hacer que actue profundamente.
Fuente: http://thebeautydepartment.com
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